Aunque es verdad que cada vez nos cuesta más leer libros, tal vez por habernos acostumbrado a saltar de enlace en enlace y a “picotear” en internet, sumergirse en verano en la lectura de un libro puede llegar a ser tan gratificante como darse un chapuzón, regalarse una siesta bajo un pino o comerse a media tarde un cucurucho de dulce de leche.

A continuación, os ofrecemos una pequeñísima selección para aquellas y aquellos valientes que quieran dejar de ser durante el mes de agosto “multitarea” y estén dispuestos a gozar con la lectura de algunas de estas obras:

1.- “Cocinar. Una historia natural de la transformación”. Michael Pollan. Debate. 2014.
Quienes conozcan a Michael Pollan ya saben cómo se las gasta: manda detectives a husmear al supermercado, investiga los dilemas de los omnívoros, retrata la triste vida de una vaca, desde la ubre hasta la mesa, enseña normas paras aprender a comer, etc. En este interesante libro de 460 páginas, Pollan, de 58 años, al que “Newsweek” considera uno de los 10 nuevos líderes de pensamiento, se dedica a aprender a cocinar desde cero el pan, señala que “el queso tiene mucho que ver con el lado oscuro de la vida” y asegura que comida “es cualquier cosa con menos de cinco ingredientes”.

Sobre el alcohol, desvela que existe una sugerente teoría antropológica que sitúa en el deseo humano de conseguir un suministro estable de alcohol –y no de comida– la razón por la que cambiamos la caza por la agricultura y dijimos adiós a la vida nómada. También revela que a los elefantes, a las ratas, a los pájaros o a las musarañas, y por supuesto a los monos, les gusta achisparse de vez en cuando tanto como a nosotros.

Por último, plantea que hervir y cocinar en la olla ayudó a aumentar la población al facilitar que el destete de las criaturas se pudiese adelantar.

2.- “Big Brother”. Lionel Shriver. Anagrama. 2014.
Cada vez la comida nos hace sentirnos más culpables. Y, como decía la directora de cine Isabel Coixet sobre este libro, no conocemos la mesura: o nos atracamos de patatas fritas y donuts o nos hacemos adictos a la avena y al seitán. En “Big Brother” la autora relata una historia basada en hechos reales en la que una mujer (ella) decide ayudar a su hermano obeso a perder la mitad de su peso y, ya de paso, a perder ella misma los kilos que cree que le sobran. Lo auténticamente interesante de la novela es la descripción certera de las obsesiones contemporáneas respecto a la comida. Los kilos que ganamos, los kilos que perdemos, son la expresión corpórea de nuestros miedos, nuestros triunfos, nuestras inseguridades, nuestras manías y nuestras penas.

Comer es el efecto de saciar una necesidad primaria, pero la gran ironía, señala Lionel Shriver, es que “lo satisfactorio, que es el deseo, deja de ser placentero cuando tienes demasiado de lo que quieres. Entonces, muere el deseo y nace otra cosa”.

3.- “El gourmet solitario”. Jiro Taniguchi y Masayuki Kusumi. Editorial Astiberri. 2012.
Un hombre solitario, con un trabajo que le permite una gran movilidad, un “viajante” para entendernos, recorre las calles de Tokio y de otras ciudades japonesas para visitar a sus clientes en este “manga”. Cada día es una nueva ocasión para redescubrir un barrio que ya conoce o para internarse por uno nuevo. Para este hombre solitario el momento de la comida constituye una aventura, casi un viaje por los cinco sentidos hasta llegar al centro de la mente. A lo largo de 19 capítulos “El gourmet solitario” nos presenta otros tantos platos de la cocina japonesa y traza un auténtico retrato sociológico de Japón. Un libro para “comérselo” que nos ayuda a ver el lado bueno de la vida…

4.- “Enciclopedia culinaria: la Cocina Completa”, Marquesa de Parabere, Editorial Espasa Calpe. 1933.
Publicado en 1933 por María Manuela Eugenia Carolina Mestayer de Echagüe, sus casi 91 años de vida no impiden que esta obra siga siendo un referente en la cocina actual. Conocida bajo el pseudónimo de Marquesa de Parabere (1877-1949), está considerada por algunos cocineros y gastrónomos como la autora del más completo libro de recetas publicado en España. Aquí encontrarás recetas increíbles de las que hablan y no paran quienes las han recreado, desde la paella valenciana, hasta el cocido español, pasando por delicias a la “Pignatelli”, ángeles a caballo, flan Josephine Baker, ensalada jockey-club, arroz de vigilia… El único consejo que nos sugieren sus muchas y muchos discípulos es sustituir algunos ingredientes antiguos por otros similares de ahora…