La Unión Europea está considerando revisar su actual directiva sobre los artículos de cerámica que entran en contacto con los alimentos, según informa en su Cuestionario para el uso ocasional de vajillas. Para tal fin, pide a los ciudadanos que participen en una encuesta a la que se accede desde el anterior enlace.

Se trata –según explican- de que “algunos artículos de cerámica y cristal muy tradicionales o artesanales” son usados únicamente de manera ocasional como puede ser el caso de “vasos de vino de cristal, un servicio de platos de porcelana heredado o un molde para un pastel de Navidad” y, en cambio, los análisis que se realizan para determinar los límites legales de plomo, cadmio y otros metales se desarrollan normalmente simulando el peor escenario y un uso diario durante toda una vida.

Así, con esta encuesta a la que se nos anima a participar se pretende “investigar si la legislación futura debería considerar el concepto de uso ocasional, al establecer límites legales en el uso de esos artículos”.

Asimismo, se explica que “para asegurarnos de que lo que comemos es seguro no basta con analizar los alimentos en sí mismos” sino que además se ha de hacer con “cualquier cosa que entre en contacto con los alimentos durante el proceso de producción, empaquetado, transporte, almacenamiento, preparación y consumo”.